jueves, 5 de febrero de 2015

El valor de la vida humana, un mensaje lleno de esperanzas y emociones.



Este vídeo está especialmente dedicado a todos los que os implicáis desde vuestro compromiso por mejorar y hacer posible un mundo más humano y sin prejuicios, en especial a quienes iniciáis un recorrido de aprendizaje sobre la atención educativa a la diversidad desde la asignatura de educación infantil  Atención Educativa a las Dificultades de Aprendizaje. Se trata de un vídeo con el que despidió la asignatura María José Aparicio en cursos anteriores y que os dedico para desearos a todos un buen cuatrimestre, comparto con vosotros un mensaje de María José cargado de esperanza y emociones. 

Me gustaría poder añadir algo antes de concluir mi paso por la asignatura  de Atención Educativa a las Dificultades de Aprendizaje, porque me ha resultado sumamente interesante y original la manera en la que se ha enfocado la materia, desde la participación de todos. Cada implicación, sugerencia, intervención, etc. llevada a cabo por cada uno de los que hemos formado el grupo, me ha llevado a la conclusión de que compartir las ideas es, sin duda, muy beneficioso para conocer diferentes puntos de vista sobre un mismo tema. 

Por todo esto surgió en mí la idea de elaborar un video de concienciación social dedicado a todas las personas que formamos la humanidad. La idea resultó, precisamente, de esa dinámica que nos ha precedido en todo el cuatrimestre y que ya he mencionado unas líneas más arriba. 

¿Diferentes? ¿Y quién no lo es? Ese fue el primer interrogante que se me planteó. Todos somos iguales, pero diferentes. ¿En qué nos igualamos?, segunda incógnita a la que quería dar respuesta. Nuestras semejanzas radican, precisamente, en las limitaciones que nos hacen ser hombres: ¿Ceguera? Puede ser física o psíquica, pero TODOS, alguna vez, hemos caminado a oscuras, sin poder ver por dónde íbamos. ¿Invalidez? También puede ser física o psíquica, de nuevo se me planteaba el hecho de que TODOS, en algún momento de nuestra vida, nos hemos visto impedidos, sin fuerzas para avanzar.... Por lo tanto, TODOS SOMOS IGUALES, PORQUE TODOS TENEMOS LIMITACIONES. Pero quería ir más lejos aún y me propuse la siguiente cuestión ¿Qué nos hace diferentes? La respuesta surgió en mí rápida como un rayo. La diferencia está en la manera que tiene cada hombre para enfrentar sus propias limitaciones. Hay dos posibilidades, afrontarlas desde la confianza o desde el desaliento. El vídeo es una llamada social para vivir desde la esperanza. Primero, desde la aceptación y el respeto a uno mismo; segundo, desde el esfuerzo y la lucha por superar, con paciencia, perseverancia y esperanza, aquellas metas que, dentro de nuestras capacidades, nos veamos capaces de vencer; y, tercero, desde la confianza y seguridad de saberse arropado por las personas que te rodean y te quieren. En este punto aparecen los prejuicios que a veces nos invaden. Prejuicios hacia nosotros mismos y hacia los demás. El vídeo plantea también este tema ensalzando distintos tipos de personas que han sido capaces de abrazar su propia situación y superarse. Es una llamada social a la aceptación de todos en una sociedad que a TODOS nos pertenece. Una llamada a dar apoyo al que lo necesite, sin olvidarse de uno mismo.

Para ello decidí escoger un tema musical que mucho tiene que ver con el contenido que quería tratar. De la banda sonora original de Pocahontas escogí una pieza central. En ella, el autor, Allan Menken, nos habla sobre las diferencias entre los hombres, pero a la par, de las semejanzas. El resultado de acoplar las imágenes a la música ha dado vida a este pequeño video-mensaje que, a través de imágenes extraídas de la red con rico contenido visual, pretende ser un toque de atención a una sociedad que, en ocasiones, se muestra incrédula en aceptar sus posibilidades y las de los demás, sea cual sea su situación.

María José Aparicio Úbeda (1º de Educación Infantil)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por contribuir con sus comentarios a las entradas de nuestra Revista Digital.